Pobreza de mexicanos en EU; además, víctimas de enfermedades

En Estados Unidos, todos los vientos están en contra de los migrantes, entre ellos, cientos, miles quizá originarios de Veracruz, de tal modo que el investigador Rafael Arias Hernández asegura que la economía jarocha depende de las remesas, por encima de los ingresos derivados de la caña de azúcar, el café, los cítricos y la corrupción política.

Por ejemplo:

En 19 de los 50 estados de la Unión Americana hay leyes xenófobas y racistas.

El discurso, filosofía de vida, del precandidato del partido Republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, en contra de quien, y entre tantos otros miles, se han lanzado Salma Hayek, Ana de la Reguera y Jorge Ramos.

La gran estafa de Barack Obama, quien ganara la elección y reelección presidencial con el voto migrante, de que serían legalizados y a todos engañó.

La feroz persecución policiaca en contra de todos ellos por el único delito de que caminan como mexicanos, miran como mexicanos, gesticulan como mexicanos y huyen como mexicanos.

La repatriación de paisanos como nunca antes en la historia presidencial.

La disputa de los precandidatos a la Casa Blanca sobre los migrantes… como carne de cañón.

La tibieza del peñismo para reclamar el mínimo y básico respeto a los derechos humanos de los paisanos que para sobrevivir y vivir han necesitado migrar al otro lado.

El cruce del río Blanco y del desierto como un infierno, una pesadilla, que desde el siglo pasado, cuando iniciara con Miguel Alemán Valdés presidente de la república, todavía está vigente.

La mitad de los migrantes de América Latina, entre ellos, mexicanos, sin papeles para su estancia regular en EU.

Y, por tanto, lo último: todos ellos convertidos en grupos vulnerables (“muy vulnerables” dice el reporte del Consejo Nacional de Población, CONAPO) en las políticas de salud física y mental.

La vida migrante como una pesadilla, ante la ineficacia de la política económica en México, tanto federal como estatal en el caso de Veracruz, incapaz de ofrecer y garantizar oportunidades laborales.

2

Todavía de ñapa está la política migrante de Enrique Peña Nieto, a tono, digamos, con Barack Obama.

Por ejemplo:

Desde meses anteriores, el obispo Raúl Vera y el sacerdote José Alejandro Solalinde Guerra tocan la puerta de Los Pinos cabildeando la visa humanitaria para los migrantes de América Central (Honduras, Salvador, Guatemala y Nicaragua) en su camino por el país y evitar así, y hasta donde fuera posible, el atropello a los derechos humanos cometido por elementos policiacos, polleros y carteles.

Y sin embargo, el peñismo en la contemplación mística.

Nunca como ahora con el peñismo la repatriación de centroamericanos a su país ha alcanzado tanto éxito, quizá, acaso, y como se afirma, porque así lo solicitó Obama a Peña Nieto para evitar que más y más vecinos de América Central se trasladen a EU.

La inseguridad y los carteles y la delincuencia común y la violencia oficial han generado que partes de los migrantes dejen de caminar por el Golfo de México a EU y ahora lo hagan por el Océano Pacífico, donde hay más riesgos.

Bastaría referir que como un reclamo del duartismo las empresas ferroviarias levantaron muros de Berlín en las inmediaciones de sus estaciones del tren en Veracruz para evitar que los migrantes trepen a “La bestia”, pues un día el Fiscal Luis Ángel Bravo Contreras descubrió que significaba un ilícito.

3

El reporte de la CONAPO de los mexicanos en EU es dramático y desolador.

Por ejemplo:

Sin seguro médico, en condición irregular, diabetes creciente, el 14 por ciento está afectado en su vida diaria “con algún sentimiento desesperanzador o trastornos como estrés, ansiedad, falta de concentración e ideas negativas sobre sí mismos” (y que, bueno, también padecen muchos mexicanos en tierra nacional).

Además, la tendencia se multiplica en el caso de los paisanos con más de diez años en el país vecino, pues la lejanía y la nostalgia juntos causan estragos en la vida cotidiana.

Y más cuando miran a sus paisanos que bien o mal, con todo y los diez mil ni-nis, jóvenes que ni estudian ni trabajan tan solo en Veracruz, aquí siguen, en su patria, con los suyos, y ellos, ni modo, debieron huir al otro lado para garantizar un ingreso que aquí, se insiste, se les ha negado.

La estadística de la CONAPO resulta tan catastrófica como la del Coneval, en el caso de Veracruz, por ejemplo, cuando anunciara que 6 de cada 10 jarochos están atrapados y sin salida en la pobreza y la miseria, mientras un millón y medio de personas de un total de 8 millones de habitantes solo aplican dos comidas al día, y mal comidas, dada su terrible situación económica.

Así, la CONAPO arroja el siguiente resultado numérico sobre los paisanos en EU:
De 11.8 millones, 5.5 millones se hallan en condición de pobreza.

1.9 millones padecen diabetes miellitus.

Un millón trabajan como albañiles.

7 millones mayores de 25 años tienen menos de 12 grados de estudios.

8.5 millones carecen de documentos.

La paradoja es gravísima: la leyenda de que EU es el paraíso terrenal de los mexicanos queda descarrilada, pues aun con todo el país vecino significa una fuente de ingresos en ningún momento es el mejor de los mundos.

Ir a la nota fuente