Plantea EU mayor supervisión a Patrulla Fronteriza

El demócrata Beto O`Rourke, representante del Distrito XVI en el suroeste de Texas, y el republicano Steve Pearce, del segundo distrito en el sur de Nuevo México, introdujeron el proyecto de ley en la Cámara de Representantes en Washington.

La iniciativa fue presentada la víspera bajo el nombre de Ley de Supervisión y Participación de la Comunidad en la Observancia de la Responsabilidad en la Frontera, o la HB 4303 y pretende crear una comisión independiente de vigilancia para los asuntos de la frontera.
La comisión estaría a cargo de proteger el debido proceso, los derechos civiles y humanos de otros, los derechos de propiedad privada y la seguridad de los agentes y oficiales, y de recomendar maneras para reducir el número de muertes de inmigrantes.
La propuesta de ley también busca establecer una oficina de supervisión de derechos humanos (ombudsman) dentro del Departamento de Seguridad Nacional, para manejar las quejas sobre asuntos fronterizos y de inmigración.
La iniciativa también crearía una oficina de enlace para mejorar las relaciones con las comunidades fronterizas y exigiría más transparencia sobre los resultados de las investigaciones de los incidentes de uso de la fuerza letal en la zona.
En la actualidad, las violaciones a los derechos humanos cometidas por agentes de la Patrulla Fronteriza son investigadas por la Oficina para los Derechos Civiles y Libertades Civiles del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Sin embargo, organizaciones de derechos civiles han criticado el proceso interno, al sostener que estas investigaciones se realizan en total secrecía y sus conclusiones no son reveladas.
En diciembre pasado, la Unión de Libertades Civiles de América (ACLU) exhortó a la administración del presidente estadunidense Barack Obama y al Congreso a obligar al Departamento de Seguridad Nacional a levantar la secrecía.
Además, revelar públicamente las investigaciones sobre el uso de fuerza letal por parte de los agentes de la Patrulla Fronteriza.
“Ya es hora de que el Congreso y la Administración levanten el velo de secreto que el Departamento de Seguridad Nacional ha puesto sobre la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP)”, indicó la ACLU en su exhorto de diciembre pasado.
Es hora, de que se informe públicamente de las investigaciones, de sus revisiones internas y de los pasos que la CBP planea tomar para evitar el tipo de abusos que han tenido lugar y siguen teniendo lugar a lo largo de la frontera, señaló la organización.
“El no hacer responsables a los agentes y funcionarios de la CBP cuando cometen abusos, envía un mensaje claro a la agencia como un todo, que los comportamientos ignorados son aceptables”, señaló la ACLU.
La semana pasada, el nuevo comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, Richard “Gil” Kerlikowske, prometió trabajar para transformar las prácticas de esa dependencia, haciéndolas más transparentes y eficientes.
Kerlikowske dijo que pondrá especial atención al uso de la fuerza para la seguridad fronteriza a fin de evitar abusos sin descuidar la seguridad de los agentes.

La CBP es en la actualidad la mayor agencia de aplicación de la ley en Estados Unidos, al contar con una plantilla de más de 45 mil 600 agentes y oficiales federales.

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