Las detenciones de mexicanos en Canadá se duplican en pleno aumento migratorio

Pese a su imagen de país más acogedor que Estados Unidos, la detención de ciudadanos mexicanos en Canadá ha aumentado desde diciembre, cuando el gobierno levantó su requisito de visado para los visitantes de México, según muestran cifras obtenidas por Reuters.

Las detenciones en los primeros cinco meses de 2017 fueron más del doble de los dos años anteriores combinados, según las estadísticas de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá. La detención de mexicanos en Canadá aumentó más de diez veces en los últimos meses, de 24 arrestados en noviembre de 2016 a 331 en abril de 2017, según muestran los datos.

Ese aumento de los arrestos coincide también con un incremento de las entradas al país y de las peticiones de asilo. El número de mexicanos que presentaron solicitudes de asilo se cuadruplicó de noviembre a marzo.

El primer ministro Justin Trudeau prometió levantar el requisito de visado, impuesto por el gobierno anterior, durante la campaña electoral de 2015 en un esfuerzo por mejorar las relaciones bilaterales. Los visitantes de México ahora pueden solicitar en línea un permiso de viaje electrónico en un proceso que toma minutos.

Los migrantes mexicanos han estado viendo a Canadá como un mejor destino en el continente, mientras el gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aumenta si capacidad deportadora y endurece la persecución de los inmigrantes indocumentados.

La agencia fronteriza puede detener a extranjeros indefinidamente si cree que representan un peligro para el público, si su identidad no es clara o si se considera improbable que aparezcan para ser deportados o para iniciar un procedimiento.

El abogado Ali Esnaashari, que vive en Toronto y ha representado a los viajeros mexicanos detenidos, dijo que hubo una presión significativa sobre los detenidos para que voluntariamente se fueran del paísen lugar de pelear para quedarse.

“Por lo general se les dice: ‘Usted puede estar detenido o simplemente regresar y retirar su solicitud para entrar en el país”, dijo el abogado. “La mayoría de ellos terminan pasando una noche o dos en el centro de inmigración y luego van en el avión y vuelven a casa”.

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