La historia de Sergio Adrian Hernádez

CIUDAD JUÁREZ. El cortejo fúnebre partió de la vivienda de los padres de Sergio Adrián e hizo una parada en una iglesia, en donde la hermana mayor de Sergio se desmayó y tuvo que ser atendida por familiares.

Las condiciones precarias y las altas temperaturas en que fue velado el cuerpo del joven en su vivienda hicieron que el proceso de descomposición del cuerpo se acelerara. El fuerte olor en el recinto católico provocó que varias personas abandonaran el templo.

Varios de los asistentes portaron camisetas con leyendas en memoria de “Keko”, como le decían sus primos, y entre cantos religiosos despidieron a su amigo.

“Si él cometió un error o un delito, lo hubieran arrestado, pero por qué me lo mataron”, gritó la madre, María Guadalupe Güereca.

“Me ayuden o no me ayuden (las autoridades mexicanas) yo pienso seguir hasta que se haga justicia, no tengo papeles para cruzar (a Estados Unidos), espero que no me maten de la misma manera como mataron a mi hijo”, finalizó.

Los familiares convocaron una manifestación para mañana en el “Puente negro”, lugar donde fue asesinado Sergio Adrián.

La Fiscalía federal se encargará de la investigación del caso, que ha levantado una ola de indignación en todo el país, según informó la fiscalía estatal de Chihuahua.

Explicó que el expediente contiene “informes periciales que determinan la causa de muerte, localización de elementos balísticos, (…) resultados de marcas y huellas en la escena del crimen, distancia y trayectoria de elemento balístico, posición de la víctima y victimario”.

También contiene testimonios y otros elementos “que representan un avance significativo para formular una futura acusación por homicidio doloso”, dijo la fuente.

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