Incertidumbre en Tijuana por inicio del plan de EEUU de devolver a México a los solicitantes de asilo

Publicado el 28 de enero de 2019
por Manuel Ayala en Univision Noticias. Fotografía de Joebeth Terriquez.

Un ambiente lleno de incertidumbre es lo que autoridades municipales y migratorias, activistas y ciudadanía viven actualmente en esta ciudad, luego de que el gobierno de Estados Unidos anunciara que a paritr del viernes implementaría su nueva política para solicitantes de asilo y presentaría en la garita de San Ysidro de Tijuana a un grupo de 20 centroamericanos, quienes iniciaron ya su trámite para obtener asilo en EEUU.

Desde la madrugada de este viernes, diversos rumores y versiones extraoficiales aseguraban que estos migrantes cruzarían entre las 4:00 y las 7:00, lo que generó movimiento de activistas y algunas autoridades municipales, quienes estuvieron pendientes de ver lo que podía suceder con esta situación.

Tras confirmar que fueron notificados de esta acción que calificaron de “unilateral” y de que estos migrantes cuentan con una visa humanitaria que les permite ingresar y moverse por territorio mexicano, el gobierno de México reiteró que no aceptaría un “acuerdo de tercer país seguro”,debido a que le implicaría un compromiso vinculante de procesar en este territorio todas las solicitudes de asilo a Estados Unidos de migrantes que pasen por el país, responsabilizándose de lleno por toda la situación jurídica.

Sin embargo, sí dejó claro que con base en el compromiso con los derechos humanos y en beneficio de las personas migrantes, admitirán el ingreso de “ciertas personas” extranjeras provenientes de EEUU, que hayan recibido un citatorio ante un juez migratorio (“Notificación de Comparecencia”). México les permitirá la entrada mediante permisos de ingreso por razones humanitarias que –de manera temporal– faciliten su estancia regular en el país.

Luego de toda la situación que generó este tema en la localidad y la información incompleta que estuvo circulando, el secretario general del ayuntamiento, Leopoldo Guerrero Díaz, salió ante los medios para ofrecer la postura del municipio: no asumir la responsabilidad de los migrantes solicitantes de asilo que sean devueltos a Tijuana, dado que se trata de una problemática que le corresponde al gobierno federal asumir.

Reiteró la intención también de “ayudar” y “estar pendientes” de la situación, pero “no tener la responsabilidad” que ello implica, a menos que la federación les designe un recurso especial para poder atender y brindarle asistencia a la población que esté siendo devuelta hacia este territorio.

“Ya vivimos una experiencia muy complicada con los migrantes que llegaron en noviembre, prácticamente 6,000 de ellos, en donde el gobierno federal no estaba preparado y le tocó aquí en Tijuana precisamente al ayuntamiento asumir esa responsabilidad, muy complicada porque no estaba preparado pero hoy no hay pretextos” dijo.

Agregó que a su parecer el gobierno federal ya tuvo también esta parte de la experiencia, ya tuvo la oportunidad de ver cuáles son las complicaciones de ofrecer asistencia a los migrantes (desde la alimentación, cobija, vestido y todo lo que requieren este tipo de personas que tienen una necesidad real), por lo que espera que ellos “asuman totalmente esa responsabilidad, sobre todo por el recurso, que es lo más importante”.

El funcionario municipal insistió en que en primero se requiere de un espacio con las condiciones adecuadas para atender de forma humana a los migrantes, puesto que si ” se abren las puertas de la casa se debe estar preparado para ello”, por lo que a su parecer el albergue temporal de El Barretal debe continuar porque ahí ya se cuenta con la infraestructura y el personal adecuados para brindar las atenciones.

Mediante un comunicado, la Coalición Pro Defensa del Migrante en Tijuana así como la coalición San Diego Immigrant Rights Consortium, rechazaron tajantemente esta política migratoria impulsada por el presidente Donald Trump de “expulsar” a las personas solicitantes de asilo y obligarlas a esperar en México, por considerarla una “política de odio” que pone en peligro la vida de las personas vulnerables.

Señalaron que va en contra de sus valores, así como de las leyes internacionales de asilo que han sido “abrazadas y respetadas” por ambos países durante décadas, ya que las personas que buscan asilo “no son una amenaza”.

En dicho documento las asociaciones exhortan tanto a México como EEUU a considerar los impactos negativos que esta política podría tener en los albergues sobrepoblados y sobresaturados de Tijuana, lo cual pone en riesgo la propia vida de las personas que están buscando ayuda, por lo que piden abandonar estas medidas.

La organización Pueblo Sin Fronteras coincidió también en asegurar que estas normas ponen en riesgo la vida de las personas solicitantes de asilo y a través de un comunicado hicieron extensiva la petición de abandonar esta práctica que no significa más que “un paso más hacia la prohibición de refugiadas y refugiados de Estados Unidos y hacia la conversión de todo México en una policía migratoria para el gobierno estadounidense”.

Esta última aseveración está relacionada con el hecho de que consideran como “cómplice” al gobierno de México en esta “violación” a los derechos humanos al aceptar que se le entreguen solicitantes de asilo, los cuales huyeron de sus países a través de ese país para llegar a refugiarse en EEUU.

“El nuevo gobierno de México, al aceptar el plan de Trump, está ejecutando una política de “tercer país seguro” sin reconocerlo y permite una violación incluso más profunda de la soberanía mexicana”, mencionaron en el documento.

Ir a la nota fuente