En ese orden, desde el 17 de enero, los migrantes que salieron de Honduras y de otros países centroamericanos son atendidos por este grupo de especialistas conformado por miembros de Protección Civil, médicos y paramédicos de la Unidad Médica de Emergencia de Copeco.
El personal asistió con consultas médicas a los migrantes que han sufrido alguna alteración en su salud como hipertensión, descompensaciones, insolación, cuadros gripales, quemaduras en su piel, entre otras anormalidades que han sufrido en la travesía.
Además, diariamente el personal de Copeco entrega a las personas que solicitan sus servicios kit de aseo personal que contienen papel higiénico, jabón y toallas sanitarias para la damas, entre otros accesorios personales.
También les suplen de un botiquín de primeros auxilios que lleva algunas cremas para quemaduras, medicamentos y gazas; para la atención de los bebés se les brinda a los migrantes un paquetito que contiene pañales, toallas húmedas, vaselina, entre otros accesorios para el cuidado.
Además del cuidado especializado, Copeco ha entregado cerca de 30,000 platos de comida a los migrantes quienes en su mayoría han recibido alimentación los tres tiempos diarios y agua para su consumo.
El sub director de Protección Civil, Gabriel Rubio, explicó que ha sido una jornada de trabajo muy larga y extenuante, pero se realiza con dedicación para auxiliar a los compatriotas y de otras nacionalidades que requieran del servicio que presta el equipo de Copeco.
“La jornada inicia a las 6:00 de la mañana y se concluye a las 9:00 de la noche hasta que se atiende a la última persona que llegó al campamento a solicitar nuestra asistencia, es largo el trabajo pero nos satisface cumplir con el mandato del ministro Lisandro Rosales y del presidente Juan Orlando Hernández de dar un auxilio a nuestros compatriotas”, expresó Rubio.
“En los primeros días se atendió a 3200 personas, la cifra subió rápidamente hasta llegar a los 9,544 migrantes auxiliados, entre los que, además de hondureños, hay salvadoreños, guatemaltecos, nicaragüenses”, destacó.
Además del auxilio médico, Copeco ha realizado el traslado seguro a sus comunidades de origen de miles de compatriotas que determinaron dejar atrás esta peligrosa ruta, y retornar sanos y salvos con sus familias.
Tras cerrar el 2018 con 75 mil 279 hondureños deportados, en las primeras tres semanas de 2019 los retornos de connacionales se redujeron en 43 por ciento, según datos oficiales.
De acuerdo al último informe del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigo), desde el uno hasta el 18 de enero de 2019 un total de 2 mil 412 hondureños han sido deportados tanto por la vía aérea como terrestre.
El documento subraya que se trata de una disminución de 43.3 % en la repatriaciones de connacionales frente a los 4 mil 255 casos que se presentaron enero de 2018.