El gobierno estadounidense avanzó con la idea del muro sin saber si era realmente útil, denuncia reporte oficial

El gobierno de Donald Trump “está planeando construir nuevas barreras físicas (en la frontera), pero todavía no ha evaluado el impacto de la valla actual”, advierte la Oficina de Rendición de Cuentas en un nuevo reporte.

Mientras el presidente visitaba los prototipos de muro en la frontera, el organismo público que fiscaliza la gestión del gobierno ultimaba un reporte que recomienda a la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) que use más datos y análisis antes de tomar decisiones millonarias. Los ocho contratos para construir en San Diego, California, los modelos de muro costaron 5 millones de dólares.

La Oficina de Rendición de Cuentas (GAO) subraya que el gobierno “no ha desarrollado métricas que, de forma sistemática, usen datos reunidos para evaluar cómo el muro fronterizo contribuye a su misión”. Y pese a que el organismo lleva demandándolos años y pese a que esos datos no llegarán hasta 2019, GAO recuerda que el gobierno ya está desarrollando la orden ejecutiva de Trump en seguridad fronteriza.

Según GAO, antes de tomar más decisiones, el gobierno debería saber cuántos cruces evitaría cada método de separación fronteriza, entre otras consecuencias. “CBP ha progresado desplegando tecnología de vigilancia a lo largo de la frontera sur, pero no ha valorado completamente su efectividad”, dice sobre otras tecnologías complementarias al muro.

Pese a esa ausencia de datos, el presidente Trump dijo en su reciente visita a la frontera que un muro “salvará miles y miles de vidas y ahorrará cientos de miles de dólares a los contribuyentes”. También defendió los prototipos construidos de muro porque, según él, la valla actual es totalmente insuficiente: “Son como escaladores profesionales de montaña, son unos escaladores increíbles”, dijo ante los medios.

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