El condado texano de El Paso aumenta sus esfuerzos para asistir a migrantes recién llegados

Después de horas de debate a puerta cerrada, los cinco miembros del condado de El Paso, Texas acordaron por unanimidad la creación de una figura que organice la ayuda a los migrantes que dejen de estar bajo la custodia federal. Sin embargo, no decidieron cómo distribuir los 100 000 dólares que ya habían presupuestados para la asistencia a migrantes.

Esta decisión llega después de que el pasado lunes la comisión del condado oyera los reclamos de los grupos defensores de migrantes para hacer frente a la gran afluencia de personas que salen cada día de los centros de detención federales. Según el juez del condado texano de El Paso, Ricardo Samaniego, en el condado una media diaria de más de 650 inmigrantes son puestos en libertad. Por otro lado, Rubén García, director ejecutivo de la organización Annuntiation House, advierte que la última semana recibieron 3600 migrantes, el récord en sus años de actividad.

En líneas generales, las organizaciones solicitaron invertir en un centro de bienvenida de inmigrantes o crear un departamento para ayudar a los recién llegados. Por su parte, David Scout, miembro de la comisión del condado, propone facilitar ayuda para el transporte, construir un centro para refugiados o crear un departamento llamado “Oficina para nuevos estadounidenses”. El comisionado se basa en la experiencia del condado de San Diego, que administra un centro de refugiados, facilita las revisiones médicas y ha creado un grupo de trabajo para la crisis migratoria.

No obstante, en el condado de El Paso, Texas estas propuestas no se pondrán en marcha en el corto plazo ya que, según Samaniego están esperando a conocer los detalles del centro de procesamiento de migrantes fundado por el gobierno federal. Por tanto, los 100 000 dólares que se podrían destinar a estos proyectos quedarán de momento sin asignación, de acuerdo con las declaraciones del propio juez.

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