“Hoy le pido a cada uno que nos muestre liderazgo para detener la formación de las caravanas, que han traído crimen, violencia e inestabilidad a la región”, sostuvo Nielsen.
La petición de secretaria de Seguridad Nacional estadounidense se produjo en el marco de la inauguración de una de una reunión de ministros y secretarios de seguridad de los países del Triángulo Norte de Centroamérica.
En la reunión, que se espera concluya la tarde de este miércoles, se firmará un acuerdo entre estos países centroamericanos y Estados Unidos para impulsar un “nuevo plan de seguridad regional”, en el que Nielsen espera incluir a México.
Según la representante del Gobierno de Donald Trump, este será un “plan compacto” para combatir la trata y tráfico de personas, atacar el crimen organizado y las pandillas, expandir la inteligencia y la seguridad en las fronteras.
“Compartimos una causa común para resolver este asunto y para avanzar en la prosperidad y seguridad de nuestras naciones”, concluyó Nielsen.
En el evento, realizado en la Academia Internacional para el Cumplimiento de la Ley (ILEA), participaron los ministros de seguridad de El Salvador, Mauricio Ramírez Landaverde; el ministro de Gobernación de Guatemala, Enrique Degenhart, y el secretario de Estado en el Despacho de Seguridad hondureño, Julián Pacheco Tinoco.
Ramírez Landaverde señaló que en esta reunión también se dará “seguimiento a los compromisos y acuerdos” suscritos por los tres países en una conferencia realizada en octubre de 2018 en Estados Unidos.
“Esperamos concretar importantes acuerdos y, de esa manera, dar avances sustanciales en el logro de mayores niveles de seguridad y tranquilidad para nuestros ciudadanos”, acotó el ministro salvadoreño.
Destacó que los tres países han alcanzado “avances importantísimos” para atender “el nuevo fenómeno y nueva modalidad” de migración irregular, en referencia a las caravanas.
Miles de centroamericanos -en su mayoría hondureños y salvadoreños- abandonaron sus países a mediados de octubre de 2018 en distintas caravanas con el afán de llegar a Estados Unidos y solicitar asilo.
Entre las razones que han llevado a estas personas a migrar en grupos, según diversas fuentes, se encuentran la búsqueda de mejores condiciones de vida y escapar de la violencia de las pandillas.
Trump declaró el pasado 15 de febrero una “emergencia nacional” para financiar la construcción de una barrera en la frontera con México, alegando una “invasión” con drogas, “todo tipo de criminales y de pandillas”.
Una coalición de 16 fiscales generales de diferentes estados presentó el lunes una demanda contra Trump, en un intento por frenar la “emergencia nacional” con la que el gobernante busca recaudar casi 8.000 millones de dólares.