Crimen organizado “recluta” a migrantes, denuncian

TULTITLÁN, Méx. Organismos defensores de derechos humanos pidieron al gobernador Eruviel Ávila Villegas mayor atención al corredor de migrantes Lechería-Tultitlán-Huehuetoca, en esta última localidad donde grupos criminales enrolan a centroamericanos.

La Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos, todos los derechos para todos y todas, propuso al gobernador mexiquense replantear la posibilidad de abrir otro albergue en Lechería o crear brigadas humanitarias en esa comunidad, a la que llegan los migrantes en ferrocarril.

En carta pública fechada el pasado 2 de octubre, dicha red relata testimonios que refieren que en Huehuetoca operan grupos criminales armados, a bordo de camionetas y automóviles, que “enrolan” a centroamericanos en actividades delictivas.

Agrega que en ese municipio presuntos “polleros” instalaron un campamento junto a las vías del tren, que en principio utilizaban para cocinar y comer, aunque ahora “se ha convertido en centro de reunión de los que ingieren bebidas alcohólicas, fuman piedra y mariguana”.

Dicha red de “polleros” cobra el uso de la vía y el pasado 1 de septiembre pagaron a los maquinistas y a los de seguridad para que el tren aminorara la velocidad al mínimo, cobrando 200 pesos a cada persona que quisiera subirse al tren. Ese día se fueron cerca de 120 personas”.

Los defensores de derechos humanos relatan en la carta pública que a Lechería, en Tultitlán, llegan trenes de Chiapas y Tabasco, por lo que es necesaria la reapertura de la Casa del Migrante.

El escrito asegura que al inicio el gobierno estatal proporcionó transporte a los migrantes de Lechería a Huehuetoca, aunque luego suspendió el servicio y éstos se dispersan por la zona o caminan 50 kilómetros para llegar de un punto al otro.

“Esta situación ha provocado que la zona sea propicia para las extorsiones hacia los migrantes. En los diferentes testimonios nos han compartido que grupos de delincuentes y algunos policías estatales y municipales han exigido dinero a cambio de no entregarlos a las autoridades migratorias”, afirma.

Uno de los testimonios refiere: “Lo que nos dijeron es que nos iban a entregar a la migración, primero nos comenzaron a revisar las mochilas, después nos vaciaron todos los bolsillos nos sacaron el dinero, […] era la patrulla SP1423, […] nos dijo que si salía otra patrulla que le dijéramos que el comandante Plata ya los había checado y nos sacaron por todo el grupo como 2 mil pesos”.

Los firmantes del documento solicitaron a Ávila Villegas atender la problemática de dicho corredor, pues los dos albergues de Huehuetoca atienden sólo a ese municipio, además de generar políticas públicas en torno al tema de la migración e investigar, en coordinación con otras instancias, los supuestos abusos cometidos por personal de vigilancia de las vías.

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