Acusan violación a DH de niños migrantes

Tapachula, México (21 septiembre 2012).- Investigadores de la Universidad de Lanus, de Argentina, y el Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, en Tapachula, presentaron hoy el informe “Los Derechos Humanos de los niños, niñas y adolescentes migrantes en la frontera México-Guatemala”, tras una investigación de dos años en la que encontraron que México viola sus propias leyes y tratados internacionales en materia de infancia.

Pablo Ceriani, coordinador del Programa de Migración y Derechos Humanos de la universidad argentina, explicó que la política mexicana en cuanto a los niños migrantes se enfoca sólo en controlar el flujo migratorio a través de la detención y repatriación, pero no se atienden las causas estructurales.

“Los niños no pueden estar detenidos por razones migratorias, eso lo dice la ONU y UNICEF, sin embargo, estos chicos son detenidos en condiciones inadecuadas y luego son repatriados sin que realmente se evalúen, como existe en la ley de migración, sí lo que conviene es repatriarlo o brindarle protección de sus derechos, porque (al regresar a su país) pueden revivir casos de violencia familiar o social”.

Señalo que existen serias deficiencias en la atención que se brinda durante las detenciones a los niños, particularmente en la estación migratoria Siglo XXI, ubicada en Tapachula y considerada la más grande de Latinoamérica, en donde no hay asistencia jurídica para los niños, la alimentaciones es deficiente al igual que la atención sanitaria y sicológica, esta ultima repercute en niños víctimas de trata y condiciones de vulnerabilidad.

Incluso, indicó que dentro de la estación migratoria se violan los derechos elementales de la infancia, son víctimas de medidas de castigo por problemas disciplinarios, enviándolos a celdas destinadas para adultos o celdas de castigo.

También sufren restricciones al derecho de asilo, deficiencias en la protección consular, entre otras cosas. Hay serias deficiencias en la atención que se brinda a los niño, aseveró”.

Explicó que los niños encontrados en la estación migratoria oscilan entre los 12 y 17 años de edad, aunque se encontraron detenidas a madres adolescentes con niños de dos o tres años lo que es una circunstancia denigrante y que no debería suceder.

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